El microrrelato Princesa de voz fue escrito en Chinchón (Madrid) el 28 de septiembre de 2019. Habíamos llegado esa misma mañana y, tras una buena comida y el descanso posterior, aprovechamos la tarde para visitar la Iglesia de Nuestra señora de la Asunción y pasar un rato admirando las vistas de la Plaza Mayor, del castillo y de todo el pueblo desde la Plaza del Galaz. Allí se ubica la famosa Torre del Reloj de Chinchón. Allí capturé una piedra y la convertí en ficción.
Princesa de voz
Había una torre sin iglesia que encerraba una princesa. La princesa era solo voz de campana. Atrapada, vino el trueno a rescatarla y juntos jugaron a ser otros.



Sí, habían sonado realmente las campanadas en la torre, y también el estruendo de un petardo que vino a coincidir con la última campanada. Aquellos eventos acústicos me llevaron a escribir este microrrelato. Hacía mucho tiempo que no creaba un nuevo texto sobre piedra y me sentí bien. Sobre los pliegues y las derivaciones de este microcuento quizá toque hablar en otra ocasión.
Si pasas por Chinchón, no puedes perderte la preciosa vista del pueblo que se tiene desde la plaza de la torre del reloj. Si, después de un rato maravillándote con ello, quieres buscar por el suelo o los alcorques, quizá suenen nuevas campanadas.